En Pasto familia da la vida por los peluditos. Aseguran que no tienen ayuda

En la ciudad de Pasto, capital de Nariño, una familia da la vida por la defensa de los animales de calle. Pero es mínima la ayuda que reciben.

ABRA NOTICIAS habló con la rescatista y estudiante de Veterinaria, Verónica Chamorro Chacón, quien nos contó que hace 10 años inició con ese amor a los animales y empezó a rescatarlos y 6 años trabaja junto con su familia que reside en el barrio Santa Mónica de la Comuna Tres.

“Soy una rescatista independiente, lo hacemos desde nuestro núcleo familiar como mi madre, mi hermano y mi pareja, somos todos animalistas en la casa y nos encargamos del rescate, protección, recuperación y adopción de los animales”, dijo Verónica.

¿De dónde le nació el amor a los animales?

Agregó que el amor a los canes, felinos, aves, entre otros, nació cuando estaba en el colegio, luego de que conociera a su compañera de nombre Gabriela quien llevaba alimentos a los animales. Así mismo vio situaciones que se registraban en el centro educativo, los golpeaban, otros eran maltratados, aves lesionadas y eso la conmovió a seguir luchando contra el maltrato animal.

Asegura que el amor hacia los animales nació cuando tenía 13 años e inicialmente empezó a llevarles alimentos, luego recogía a los cachorritos abandonados en la calle. “Al principio fue muy duro porque no tenía apoyo de mi familia, por lo que me tocaba regalarlos. Pero ahorita ya tenemos procesos estrictos porque todos estamos involucrados en la causa”.

La rescatista independiente cuenta que su hermano se encarga del cuidado de los gatos, mi mamá cuida los perros, mientras ella avanza con los estudios profesionales en Veterinaria en la Universidad de Nariño, pero se encarga de la salud de los animales, así mismo da asesorías a los adoptantes. “Para el proceso de adopción mi madre se encarga de las entrevistas, mi pareja y yo nos encargamos de hacer las visitas previas, determinamos que todo esté en orden y si cumplen con los requisitos hacemos entrega de los animales y se hace seguimiento”.

Los rescatistas hacen vistas esporádicas porque tienen más de 300 animales en adopción, lo cual se les dificulta hacer visitas todos los días, una por el tiempo y otra por su estudio. “La mayor parte de seguimiento es virtual”.

Agrega que han adoptado en Putumayo, en Buesaco, en Bogotá y otros en Estados Unidos, pero la mayoría las hacen en Pasto. “Es difícil encontrar buenos adoptantes”.

Las ayudas

La joven asegura que es un sacrificio y muy duro porque los ha golpeado económicamente, porque en oportunidades han tenido que quedarse con todos los perros y gatos que no se adoptan y segundo que al inicio recibían ayudas como esterilizaciones, alimentos, consultas o medicamentos, pero a medida que pasa el tiempo las ayudas se han vuelto muy escasas para ellos.

“Es un proceso muy duro, porque nos hemos quedado sin concentrado para los más de 20 animales que tenemos, no se adoptan, otros están y llegan enfermos que necesitan de medicinas costosas y cirugías. En oportunidades nos ha tocado vender rifas, vender dulces en los buses, cantar en las plazas, entre otras actividades con el fin de recolectar fondos para sostenerlos”, señaló la estudiante de Veterinaria.

Las dificultades

Verónica, dice que en el momento requieren de concentrado, de esterilizaciones, desparasitantes vacunas. Afirma que tiene dificultades con los vecinos de su sector, le gritan la local de los perros, culpan a los canes de los excrementos, es decir no se sensibilizan, sino que crece como esa indiferencia hacia los animales de calle y con la rescatista.

“Tenemos a cargo cuatro perros del CAI de Santa Mónica. Hace 3 años se reunió la junta del barrio y quisieron sacármelos, hacerlos sacrificar en el CBA, pero me resistí y tuve apoyo de fundaciones animalistas y de otros rescatistas haciendo un plantón, se unieron abogados defensores de los animales en Pasto, lo cual me defendieron y no se permitió que me sacaran los perros”, señaló.

A quien agradece

La estudiante de Veterinaria, dijo que sí agradece enormemente a la Policía porque le han colaborado para atender los casos de maltrato animal. Así mismo al veterinario Alex Benavides que le colaboró con el caso de un can que fue golpeado fuertemente en uno de sus ojos cerca al CAI.

¿Qué les dice a los nariñenses?

“No es necesario ser rescatista para ayudar a los animales, hay muchas formas y maneras. La primera es adoptar un mestizo, no tener en cuenta la raza por que todo el mundo los quiere adoptar, segundo es que nos puedan donar concentrado, desparasitantes, ayudar con los tratamientos de los enfermos, crear hogares de paso, donar esterilizaciones, sensibilizar a las personas, alimentar y ayudar a los animales de calle”, señaló.

Asegura que “como sociedad hemos fallado porque los animales que están en la calle es por culpa de nosotros y los hemos condenado a eso y no sigamos maltratándolos sino debemos ayudarlos. Tratemos de ayudarnos entre nosotros y así acabar con los animales en situación de calle y el maltrato animal. La esterilización es lo más importante”.

¿Qué les dice a los funcionarios?   

Verónica, afirma que los funcionarios de las secretarías de Medio Ambiente tanto municipal como departamental hagan un enfoque con los rescatistas independientes que son varios los que existen en el municipio que no reciben ayudas.

“Nosotros somos los que más rescatamos y los que luchamos por la causa. Que los proceso no solo se haga con las fundaciones, sino que también tengan en cuenta a los rescatistas independientes que lucha día tras día por los derechos de los animales, pero que necesitan de recursos”, señaló.

Finalmente indico que “si realmente nos ayudaran en una escala grande, solo con las esterilizaciones una vez al año, pensamos que, además, cambiando la mentalidad de las personas podíamos hacer un mundo mejor para los animales y no un infierno como se viene haciendo”.

Sin embargo, la única ayuda la reciben en varias oportunidades es de agentes de Policía como el patrullero Danny Alexander Ortiz.